¿Qué es la endometriosis?

Publicado el 21 octubre 2020 |Última actualización el 29 junio 2022 |Fertilidad femenina.|Artículo revisado por: El equipo médico de CIRH

Quizás ya hayas oído hablar de endometriosis, es una enfermedad común que sufren muchas mujeres en edad fértil. Tanto si te suena el término como si padeces esta afección o, por el contrario, no lo habías escuchado nunca, lo importante es que has llegado hasta CIRH para informarte.

En este artículo queremos aclarar todas las dudas acerca de esta enfermedad femenina que todavía sigue siendo poco conocida en nuestra sociedad. ¿De qué se trata? ¿Qué consecuencias tiene? ¿Cómo afecta a las mujeres? También resolveremos las cuestiones que se ciernen alrededor de la fertilidad y el embarazo, ¿puedo ser madre si tengo endometriosis? ¿Existen otras opciones? Y comentaremos las causas de esta patología y cómo podemos hallar una solución a los problemas de fertilidad que puede causar, haciendo uso de ciertos tratamientos de reproducción asistida.

Al mismo tiempo, queremos visibilizar la endometriosis para que cada vez sea más fácil de diagnosticar, que poco a poco haya menos tabúes y más conocimiento. Es una enfermedad común, que sufren muchas mujeres, por lo que es importante conocerla bien y estar informados acerca de los síntomas para una más rápida detección. Muchas veces las personas que rodean a las mujeres que la sufren no son conscientes de lo que les supone, si tienen dolores fuertes, se asocia a la menstruación y es precisamente esa normalización la que puede llegar a dificultar su propia detección. Por ello, creemos que es importante conocer lo máximo posible. Conoce más acerca de la endometriosis, leyendo este artículo.

La endometriosis es una enfermedad que se origina en el útero y que se produce cuando la capa que recubre la matriz, el llamado tejido endometrial, se extiende fuera de la propia cavidad uterina y crece en otras zonas del cuerpo. Los ovarios, los ligamentos uterinos o la vejiga son algunos de los lugares más frecuentes donde este tejido se expande. La presencia de la capa fuera de su cavidad puede provocar que se desarrollen implantes y que se formen también quistes.

A consecuencia de la endometriosis, por un lado, si los ovarios quedan afectados por esta dolencia, puede llegar a haber un deterioro del tejido ovárico y a su vez la reserva de ovocitos podría reducirse. Por otro lado, la capacidad de ovular podría también verse afectada al igual que la calidad de los ovocitos, que entonces menguaría. La endometriosis además puede desarrollarse de manera gradual y en su totalidad podría dañar toda la masa ovárica.

Estamos hablando de una enfermedad que afecta de pleno a mujeres de todo el mundo y sobre la cual poco se ha comentado en la sociedad. Si bien existe un desconocimiento generalizado, a su vez se trata de una enfermedad relativamente frecuente entre mujeres de edad fértil. Aproximadamente una de cada diez lo padece y en algunos casos hasta podría ser hereditaria, es decir que pase de madres a hijas.

Dependiendo de cada mujer y en función de la afectación, podría comportar problemas de fertilidad femenina. Pero para ello es necesario revisar cuáles son las zonas perjudicadas. De media en España se necesitan unas cinco consultas para diagnosticar endometriosis. Por eso, también es transcendental la detección rápida. Si sientes mucho dolor o tienes síntomas como fatiga y cansancio en tu menstruación, si crees que podrías tener la enfermedad o tienes sospechas de infertilidad, no dudes en consultar con tu médico.

Por desgracia, hoy en día se desconocen cuáles podrían ser las causas exactas por las que aparece la endometriosis. Los síntomas y las afectaciones que puedan surgir serán de gran importancia que sean comentadas lo más rápido posible con un especialista, con tal de descartar de buenas a primeras que no haya otras posibles causas. Así que, por el momento, como no disponemos de evidencia científica que nos diga porqué sucede, deberemos estudiar caso por caso.

¿Cómo se detecta? La endometriosis se puede diagnosticar a través de varios procedimientos: Uno de ellos sería con una ecografía que examine los órganos genitales femeninos. La otra manera, más efectiva a la vez que más invasiva, sería realizar una intervención quirúrgica que denominamos laparoscopia pélvica exploradora. De esta manera, se podrá observar directamente el abdomen y la pelvis y se comprobará el estado del tejido. El médico podrá así valorar la extirpación de los implantes o quistes que se hayan podido formar e incluso aprovechar dicha intervención para quitarlos.

de padecerla. De modo que, aquellas mujeres que tengan una familiar de primer grado, como una madre o una hermana, o bien aquellas mujeres que nunca hayan tenido hijos, además de las que hayan tenido la regla temprana o la suelen tener abundante y con mucha frecuencia, tendrían más posibilidades de sufrir endometriosis.

Si la menstruación es extremadamente dolorosa, si se experimenta dolor en el bajo vientre durante el ciclo menstrual o durante las relaciones sexuales, si se tienen cólicos, fatiga o si se sospecha que pueda haber algún problema de infertilidad. Así estaríamos definiendo algunos de los síntomas más comunes en las mujeres que padecen endometriosis. Otros síntomas que también podrían aparecer serían el dolor en la vejiga o los problemas gastrointestinales parecidos a los trastornos de intestinos.

¿Sabías qué la endometriosis afecta a un 10% de las mujeres de la población mundial? Desafortunadamente, hay bastante desconocimiento entre las propias mujeres, sobre todo en edades más jóvenes, las cuales no han oído nunca hablar de ella. Además, se suele tardar en detectar, y como consecuencia, y bastante a menudo, se diagnostica cuando las pacientes acuden a un especialista porque tienen sospechas al no lograr el embarazo.

Según los profesionales de la salud, la endometriosis se suele considerar una enfermedad principalmente hormonal. Aunque ya hemos comentado algunos de los aspectos que pueden influir, también hay que tener en cuenta que existen otro tipo de factores más difíciles de controlar y predecir a cuantas mujeres afecta. Factores como por ejemplo medioambientales o genéticos, incluso inmunológicos, que pueden incidir a muchas mujeres a ser más susceptibles que otras a la hora de desarrollar esta dolencia.

Después de entender un poco más que es la endometriosis, cómo y a quién afecta realmente, naturalmente la pregunta que viene a continuación es la siguiente: ¿Se puede ser madre con endometriosis? La respuesta es sí, se puede. Porque padecer esta enfermedad no es sinónimo de infertilidad. Es cierto que las afectaciones provocadas en el aparato reproductivo dificultan la concepción de forma natural. Pero eso no quiere decir que con ayuda de la reproducción asistida o incluso de manera natural se pueda lograr el embarazo.

En mujeres menores de 35 años, aproximadamente, se puede intentar concebir hasta un año, en mujeres mayores de 35 años se aconseja probar hasta seis meses. Pasadas estas fechas si no se ha conseguido de forma natural sería altamente recomendable visitar a un especialista. La endometriosis afecta de manera directa a la fertilidad de tres de cada diez mujeres. Ya sea porque la propia enfermedad disminuye el número y la calidad de óvulos o bien porque la pelvis haya quedado distorsionada.

¿Qué soluciones existen para conseguir el embarazo? Analizando cada caso después de haber acudido al equipo médico de CIRH se valorarían las afectaciones y el tipo de tratamiento que podría ser más efectivo para lograr el embarazo. ¿Inseminación artificial o fecundación in vitro? Los tratamientos de fecundación in vitro suelen ser los más frecuentes con endometriosis, sobre todo en aquellas más avanzadas. Pero como ya hemos explicado, habrá que considerar la situación particular de cada paciente.

Otra solución, más preventiva, sería la congelación de óvulos. Como bien sabemos la endometriosis podría perjudicar la fertilidad femenina reduciendo de manera drástica los óvulos o su calidad. Para prevenir esta consecuencia a posteriori, una buena solución sería congelar los óvulos a una edad más joven, cuando todavía no se sabe si se quiere ser madre o cuando. Con un diagnóstico rápido, si la enfermedad no se ha desarrollado demasiado, la vitrificación es una opción muy interesante.

En definitiva, la endometriosis es una patología inflamatoria de los órganos femeninos, de la cual se sabe poco pero que afecta a más de un 10% de las mujeres alrededor del mundo, especialmente entre 30 y 40 años. De origen desconocido, existen diferentes grados de afectación y tratamientos para combatirla según las dolencias o si entrase en juego el objetivo de ser madre. Se trata de un proceso de evolución imprevisible que puede llegar a producir fuertes dolores en algunas mujeres, sin embargo, en otras no aparecer síntomas.

Aunque la endometriosis puede llegar a dificultar la posibilidad de quedarse embarazada, existen diferentes tratamientos que permiten controlar las afectaciones y aumentar las posibilidades de concepción. Como hemos podido ver, la reproducción asistida junto con la congelación de óvulos serían las dos opciones más viables para lograr con éxito el sueño de ser madre. Pero cabe remarcar que será esencial la individualización de cada paciente para estudiar su caso por parte de los médicos especialistas de CIRH. La detección precoz y no normalizar los dolores nos ayudarán a actuar con rapidez.

Si tienes endometriosis y necesitas ayuda para quedarte embarazada puedes solicitar una primera visita con uno de nuestros especialistas, para que estudie tu caso en particular y pueda plantear que tratamiento es el más adecuado según tu situación.

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