Las hormonas tiroideas son necesarias en el organismo para mantener la homeostasis y el funcionamiento normal de la mayor parte de los órganos y tejidos.
Una alteración en las hormonas tiroideas puede afectar a la fertilidad indirectamente, interfiriendo con el eje hipotálamo-hipófisis-gonadal, o a nivel ovárico.
Por ello, me parece muy importante explicar el eje hipotálamo-hipofisis-tiroides ya que el hipotiroidismo es uno de los desórdenes en la foliculogénesis más común en mujeres.
Si entramos en la fisiología, el eje tiroideo empieza en el hipotálamo liberando la TRH. Este péptido viaja a la hipófisis anterior para estimular en la hipófisis las células productoras de TSH y en consecuencia la liberación de TSH. La TSH viaja a la circulación sanguínea y pone en marcha la síntesis y liberación de hormonas tiroideas. La que se encuentra en mayor cantidad es la T4 y en menor medida la T3.
La T3 es la hormona activa y esta se une al receptor de hormonas tiroideas de las células de la granulosa que se encuentran en el ovario (además de muchas otras células) para que los procesos energéticos se den de forma óptima.
Por ello, en casos de hipotiroidismo o bajos niveles de hormona tiroidea activa pueden influir de varias formas:
- El hipotiroidismo produce hiperprolactinemia, que en muchos casos se traduce con anovulación e irregularidades del ciclo de la mujer.
- Las hormonas tiroideas actúan como moduladoras de la esteroidogenesis ovárica por lo que su déficit se puede traducir en dificultad para el desarrollo óptimo de los folículos impidiendo la maduración del folículo dominante pudiendo dar una situación de anovulación (no ovular).
- Folículo dominante de mala calidad dando lugar a oligoamenorrea y ciclos largos.
- Alteraciones de la fase lutea, dadas en primer lugar por un posible folículo de poca calidad además de por un favorecimiento de factores que favorecen la destrucción del cuerpo luteo.
Asimismo, el hipotiroidismo puede afectar a la fertilidad y se asocia a abortos espontáneos, problemas en el embarazo y parto prematuro y más aún si hablamos de un hipotiroidismo autoinmune en donde los anticuerpos tiroideos (especialmente TPO) son positivos.
A nivel nutricional, es importante tener en cuenta todo aquellos nutrientes que influyen en la modulación del sistema inmune y en la tiroides además de hacer especial hincapié a otros aspectos como el descanso, la actividad física y la gestión emocional. Aún así, os daré algunas recomendaciones nutricionales a tener en cuenta:
- Yodo: Nuestra tiroides requiere de yodo para su óptimo funcionamiento. En general, la incorporación de yodo a través de los alimentos es relativamente fácil. Podemos encontrarlo en la sal yodada, pescados y maricos, leche y otros lácteos.
- Vit D: La vitamina D es una hormona que regula la inflamación y el sistema inmune. En pacientes con hipotiroidismo, sobre todo de origen autoinmune, será muy importante que presenten niveles óptimos de vitamina D. La vitamina D la sintetizamos en un 90% por la piel mediante la exposición solar y la obtenemos en menor medida de la alimentación. Aún así, en caso de déficit, no se pueden remontar sus niveles ni por exposición ni por alimentación por lo que será necesario suplementar por parte del profesional.
- Selenio: Nuestro cuerpo no es capaz de sintetizarlo y tiene que consumirlo a través de la Se ha planteado que el consumo pudiera mejorar la respuesta inflamatoria en personas con hipotiroidismo A nivel alimentario, podemos consumirlo a través de carnes, pescados, mariscos, 3 nueces de Brasil al día* (máximo).
- Hierro: Es necesario revisarlo si, además del hipotiroidismo, hay otro tipo de alteraciones, sobre todo digestivas (celiaquía, Crohn, gastritis autoinmune…). No es necesario que exista anemia ferropénica para prestar atención al hierro, también es necesario revisar los niveles de ferritina en analítica.
Alimentos ricos en hierro: carne, pescado, huevos, frutos verdes, verduras de hoja verde, etc. Además, para incrementar su absorción, interesa consumir alimentos ricos en hierro junto a frutas y verduras ricas en vitamina C y A (fresas, naranja, tomate, pimiento, papaya, zanahoria, calabaza, limón, perejil, etc). Sin embargo, también será importante tener en cuenta los inhibidores del hierro en la misma comida: café, té, alcohol, calcio (leche, yogur y quesos), bebidas enriquecidas en calcio y exceso de fibra.
Finalmente, si se ha pautado Eutirox, se debe tener en cuenta que debe tomarse 1 h antes de desayunar. Menor tiempo se relaciona con mayor excreción de la medicación por las heces.